Paya Frank .- El Conflicto Árabe - Israeli
Introduccion
El conflicto palestino-israelí es un prolongado y complejo conflicto que se centra en la región de Israel y los territorios palestinos, en particular, la Franja de Gaza y Cisjordania. Esta lucha se ha desarrollado a lo largo de décadas y se origina en reclamaciones históricas y territoriales, así como en diferencias culturales, religiosas y políticas entre los dos grupos involucrados.
El conflicto se remonta al siglo XIX, cuando comenzaron a surgir tensiones entre la población judía y árabe en la región, que estaba bajo dominio otomano en ese momento. Durante la Primera Guerra Mundial, el Imperio Otomano colapsó, y Gran Bretaña tomó el control de Palestina bajo un mandato de la Liga de Naciones. Este período estableció las bases para la posterior creación de Israel.
En 1947, las Naciones Unidas aprobaron el Plan de Partición de Palestina, que buscaba dividir el territorio en un estado judío y uno árabe, con Jerusalén como un enclave internacional. Sin embargo, la oposición árabe al plan llevó a una guerra en 1948 que resultó en la creación de Israel y la diáspora de cientos de miles de refugiados palestinos.
El conflicto ha involucrado numerosos conflictos armados, incluyendo la Guerra de Suez (1956), la Guerra de los Seis Días (1967), la Guerra del Yom Kippur (1973) y varias guerras en Gaza y Líbano. También ha habido múltiples intentos de paz, como los Acuerdos de Oslo (1993) y la Iniciativa de Paz Árabe (2002).
Las cuestiones centrales del conflicto incluyen la creación de un estado palestino independiente, la ubicación de las fronteras, el estatus de Jerusalén, el retorno de los refugiados palestinos y la seguridad de Israel. Estas cuestiones han llevado a décadas de negociaciones, tensiones, actos de violencia y desconfianza entre ambas partes.
A pesar de los esfuerzos de mediación internacional, el conflicto palestino-israelí continúa sin resolverse en su totalidad, y la situación en la región sigue siendo tensa. La búsqueda de una solución pacífica y duradera sigue siendo un desafío complejo y urgente en la política global.
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