¡ Oh qué tarde
para irse en avión,
en volandas,
por el aire!
Anda,
amor,
- ¿Pero qué sabes tú
de volar, corazón?
-Nada,
amor.
El viento fue
quien movió los faralaes
de tu traje,
silbándome la canción:
¡ Oh qué tarde
para irse en avión,
en volandas,
por el aire!
Rafael Alberti, Marinero en Tierra, Poema 28
No hay comentarios:
Publicar un comentario