Navidades Blancas...
Se respira el espíritu navideño en estos días, te encargadas los buenos y las buenas intenciones.
Afloran sentimientos dormidos durante el año. Las calles se llenan de luces, de adornos propios de esta época. Este año no veremos colocados estratégicamente los puestos de churros con chocolate, nos faltará ese olor a castañas asadas que desprenden algunas calles de los mercados navideños. Es la época propicia para la consumo desmesurado, en cambio para otros, es la época de la nostalgia. La navidad trae consigo la tristeza por que recuerda más que a ese ser querido que no está con nosotros. Y en nochebuena cuando miras ya en la mesa, llena de comida, ves las sillas vacías. Faltan los abrazos y besos de los hermanos que durante el año prometen verso y charlar con una cerveza en las manos, faltará esa llamada deseándote una feliz navidad, ¡faltaran tantas cosas navidades! Que, no hay parecerá navidad. Estos días corazones se llenan de buenos deseos. El lugar de esas sillas vacías las nuevas generaciones, los nietos que ya están aquí y algunos que vienen en camino. Nuevos amigos, pero ellos no sustituyen a los que faltan. En estos días de celebraciones familiares en tantos hogares reinará la soledad, algunas lágrimas asomaran a los ojos porque ya nada como. Al mirar las fotografías de otros años veremos la misma estampa familiar, con los que no estás aquí. ¡Sus ropas se han que pasadas de moda! Recordaremos lo felices que fuimos todos juntos y, sin poder remediarlo... nos pondremos una llorar. Todo quedará suspens en el aire, un pellizco en el corazón nos a la realidad. No hay heno navidad volverá a ser. ¿Navidades blancas?
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